En esta versión participaron 143 jóvenes y un equipo de 30 adultos formadores. También llegaron a Punta de Tralca distintos directivos de los colegios y los asesores religiosos.
Por segundo año consecutivo, se realizó el encuentro de jóvenes que participan en las pastorales de los cuatro colegios SS.CC. La iniciativa es impulsada por el Equipo de Gestión SS.CC. y busca generar un espacio donde los jóvenes puedan reflexionar, encontrarse y formarse.
Fue un muy buen encuentro, con tres temas tratados en los días de jornada, que fueron: La realidad de los jóvenes chilenos hoy, Una mirada crítica de los jóvenes cristianos dentro de un contexto social y eclesial y la Experiencia personal de ser un joven SS.CC.
Hubo además encuentro entre los jóvenes, lo que siempre pasa a ser central en este tipo de experiencias, pues es lo que va dando sentido de pertenencia a una comunidad con la misma espiritualidad.
Para Sebastián Figueroa, del colegio de Viña-Valparaíso, quien estuvo a cargo de la organización junto al Colegio San Damián de Molokai, estos encuentros “priorizan los lazos de fraternidad. La congregación ha puesto un énfasis especial en la pastoral juvenil, y queremos aportar con un granito de arena para que los jóvenes sean agentes de cambio para un mundo mejor. El objetivo de este año era ponernos en onda con el sínodo de los jóvenes, al que convocó el papa Francisco, por eso el lema fue: sean la alegría de vivir y la alegría de creer”.
Sebastián evaluó esta segunda jornada como una experiencia excelente: “Se genera el encuentro, se genera la alegría de compartir, se genera un espacio de formación potente en los chiquillos, de reflexión, recreación, momentos de compartir de todo tipo, y también hay un encuentro de los adultos responsables que es súper necesario, porque nos permite mirar en qué camino vamos, si estamos en las mismas líneas pastorales y ejes formativos. Queda solo agradecer y decir que ha sido un encuentro redondito”.
Los distintos momentos de exposición y trabajo, fueron liderados por Marcelo San Martín, P. Paulo Lizama y Natacha Pavlovic.
