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La CLAR en «tiempos de minoridad y escasez»

La Junta Directiva de la CLAR se reunió en Lima y junto con reflexionar en temas tan clave como el ser minorías, se realizó el informe de la gestión que da el tono en asuntos de transparencia religiosa.

La 48a. sesión de la Junta Directiva de la CLAR (Confederación Latinoamericana de Religiosos y Religiosas) tuvo lugar el primer fin de semana de junio en Lima (Perú). Se dieron cita un total de 69 religiosas/os procedentes de 19 países, en calidad de presidentes y secretarias/os de las Conferencias Nacionales de Religiosas/os: Argentina – CONFAR, Bolivia – CBR, Brasil – CRB, Chile – CONFERRE, Colombia – CRC, Costa Rica – CONFRECOR, Cuba – CONCUR, Ecuador – CER, El Salvador – CONFRES, Guatemala – CONFREGUA, Honduras – CONFEREH, México – CIRM, Panamá – ADERYRP, Paraguay – CONFERPAR, Perú – CRP, Puerto Rico – COR, Rep. Dominicana – CONDOR, Uruguay – CONFRU y Venezuela – CONVER.

En la reflexión del sábado 2, la presidenta de la CLAR, Liliana Franco, ODN, reflexionó sobre la vida en esperanza, y el Seguimiento de Jesús y la centralidad de la relacionalidad humana. En su iluminación hizo memoria de Víctor Codina, recientemente fallecido, y de quien destacó tres palabras que marcan la actitud que debe asumir la Vida Religiosa en este momento histórico: Minoridad, Sinodalidad y Espiritualidad.

La hna. Liliana, señaló que desde la experiencia de itinerario pascual, en tiempos de minoridad y escasez, invitó a aferrarnos a la vida, con la certeza de que la muerte no es lo definitivo. Transitando la ruta de la vida, que supone sufrimiento, pero que sobre todo implica creerle a nuestro Dios, que con el estallido de la resurrección nos habita con la fuerza de la vida y la certeza de la pascua.

Dios es el eterno creador, que cuenta con las 150.000 religiosas/os de América Latina y el Caribe para continuar creando y aconteciendo en nuestra historia, al estilo de Jesús, que nos conduce a un modo de ser y de estar en el mundo revestidos de esperanza, al beber en el evangelio, saborear la Palabra, contemplando la persona de Jesús, escudriñado en la historia, en la realidad y entre los pobres, desde la lógica de lo profundo, pues es desde el lugar de lo profundo por donde Dios pasa por nuestra historia, haciendo de ella historia de salvación.

Continuó afirmando que esta hora de la Vida Religiosa es propicia para contemplar, con una contemplación que nos pone en movimiento desde la dinámica de la encarnación. El Dios Trinidad es un Dios que mira al mundo en su complejidad y en su fragilidad, y se determina a hacer redención. Debemos dejarnos afectar por la amorosa mirada que hace la efectiva compasión y provoca la renovada esperanza.

TRANSPARENCIA

Otro acápite de la reflexión fue la responsabilidad administrativa que incluye diseñar, implementar y mantener el control interno relevante en la preparación y la presentación de los estados financieros y seleccionar y aplicar políticas contables apropiadas. Liliana dijo que periódicamente hacemos una relectura de la administración de los bienes en función de nuestra misión, verificando la sostenibilidad espiritual, misional y económica de nuestros proyectos, señaló.

Hna Liliana Franco (izq.) presidenta bde la CLAR con una hermana brasilera en Lima.

Añadió que el informe económico de la CLAR nos moviliza la convicción de que los institutos de vida consagrada y las sociedades de vida apostólica pueden y deben ser sujetos protagonistas y activos del principio de gratuidad y de la lógica del don en sus actividades económicas. La radicalidad de la pobreza evangélica y la fraternidad, a través de los diferentes carismas, una vez más las evidenciamos y la ratificamos como legítimas, actuales y urgentes aportaciones al desarrollo económico, social y político de nuestro siglo, indicó la presidenta.